REDBOX 170 abre sus puertas en la ciudad de Madrid, en el barrio de Carabanchel, situado en una de las calles más emblemáticas de la zona: General Ricardos.
En un local comercial antes utilizado como salón de bodas, la intervención de Ssolid ha transformado el lugar en un centro de alquiler de trasteros con sistemas avanzados de seguridad y control de accesos, cuyo objetivo principal es ayudar a las personas de el barrio de Carabanchel a ampliar un poco más el espacio en sus hogares, a través de una filosofía que se resume en el concepto cercano de negocio de RedBox170: «Somos familia»
Si quieres conocerles, no dudes en pasarte por su local en la calle General Ricardos 170, o darte una vuelta por su página web.
Reinventarse. Palabra mágica en los tiempos que corren… encontrar nuevos horizontes y nuevas metas. Esta es la aventura que iniciamos hace ya un tiempo y que hoy es una realidad. Ha sido un camino complicado de recorrer, con muchas curvas e incertidumbre pero muy apasionante. Aún recuerdo aquella tarde en la que fuimos a las oficinas de Ssolid para que nos presentasen el proyecto. Allí encontramos a Raul, que nos explicó quiénes eran Ssolid y cómo podían darle forma a nuestro proyecto. Su serenidad y seguridad al explicarlo nos hizo pensar: ¿y porque no? Y comenzó la aventura, y la pelea con licencias y papeles por parte del arquitecto, luego vino la preparación y el montaje, en plena fase dura de pandemia…. Y en todo momento, el personal de Ssolid trabajó para que nuestro proyecto viese la luz… El departamento de montaje, como quien hace un puzle con los ojos cerrados, montó los trasteros en 10 días… sin prisa pero sin pausa y siempre con una sonrisa.
Por fin el 11 de Junio aquel sueño fue una realidad… Montse se encargó de formarnos e informarnos siempre que la buscábamos, Diego nos ayudó a plasmar quienes éramos y quienes queríamos ser en nuestra página web, Juanma peleó con nuestro sistema de alarma hasta conseguir adaptarlo a nosotros y a nuestras necesidades, Borja perfiló nuestros últimos documentos para que nuestro cohete no sólo despegase sino que se mantuviese en la legalidad… Y así todos y cada uno de ellos nos ayudaron poniendo su mejor intención para que nuestro proyecto fuese una realidad.
El esfuerzo todo lo puede y la voluntad todo lo supera. Es un tiempo de cambios, de miedo e incertidumbre, por ello poder contar con Ssolid nos abre una puerta hacia la esperanza, de que mañana será mejor. Millones de gracias Ssolid.
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